Este recurso está pensado para aquellas personas que alcanzan la autonomía suficiente como para dejar la Residencia, pero aún no tienen la autonomía que se requiere para convivir en un piso tutelado. No tienen apoyo terapéutico las 24 horas del día como ocurre en la residencia, pero sí se mantiene un apoyo diario por parte del equipo de educadores y estando muy presente en su convivencia y en su día a día.
Todos los pacientes, estén en el recurso que estén, siempre reciben una atención terapéutica basada en sesiones individuales con psicóloga, psiquiatra y educadores, y con un programa de actividades y talleres psico-educativos.