Aprender a fortalecer nuestra inteligencia emocional es importante para la comprensión de las diferentes situaciones sentimentales en las que nos veamos envueltos. Mantener un control de lo que sentimos y demostramos a las personas es un claro ejemplo de esta sabiduría, que es fundamental para nuestro desarrollo personal.
La inteligencia emocional se considera también como un ámbito de la psicología, siendo una conducta que adoptamos para la comprensión de nuestros propios sentimientos. Esta capacidad nos permitirá una mejor resolución de los problemas dejando al margen las emociones que puedan afectar a nuestras decisiones. Por este motivo, es importante contar con un buen «entrenamiento» emocional.
Aprendamos el concepto de este término tan poco aplicado
La inteligencia emocional se entiende como el manejo de las emociones y sentimientos así como el control de las reacciones propias de un individuo ante una determinada situación. Cualquier persona que sea capaz de utilizar este concepto a su favor tendrá más probabilidad de llevar relaciones favorables con otras personas.
Esto se logra a través del autoconocimiento que podamos tener para entender mucho mejor nuestros sentimientos y saber qué es lo que queremos. Gracias a esto, evitaremos caer en comparaciones que puedan afectar nuestro rendimiento en cualquier actividad de nuestro día a día. La superación de enfermedades también se ve inmersa en la aplicación de este concepto, debido a la manera en cómo afrontamos las situaciones de salud que atravesemos.
Conoce las características de la inteligencia emocional
Para lograr la plenitud en la aplicación de este concepto en nuestras vidas y mejorar nuestra toma de decisiones es importante conocer sus elementos. Identificar cada uno de ellos nos permitirá comenzar una serie de pasos a seguir para optimizar nuestra gestión de las emociones en nuestro día a día.
El autoconocimiento
Comprender nuestras emociones y en qué situaciones somos más propensos a reaccionar de cierta manera, es fundamental para poder controlarlas. Si nos sorprendemos ante la manera que respondemos a un estímulo, significa que no poseemos el autoconocimiento mínimo para este concepto.
Este es un paso importante para mejorar y amplificar nuestra inteligencia emocional. La gestión y manejo de nuestros sentimientos ante las situaciones que nos vemos inmersos es fundamental para la aplicación de este concepto en nuestra vida. No dejarse llevar por las emociones nos puede ayudar a evitar malos ratos así como el arrepentimiento de actitudes que tengamos.
La auto motivación juega su papel también
Debido a que se trata de un proceso propio de cada uno de nosotros, donde lidiaremos con las emociones de nuestro interior, es necesaria la motivación para llevarlo a cabo. Lo ideal es plantearse pequeños objetivos a lo largo del camino para evitar frustraciones.
La empatía no puede faltar
Al hablar de inteligencia emocional no pueden faltar términos como la empatía y la comprensión de situaciones ajenas a nosotros. Así como nosotros lidiamos con procesos de autoconocimiento y superación, las demás personas pasan por esta clase de evolución en su interior. Por esto, nuestras destrezas sociales deben estar destinadas a la comprensión de los escenarios en los que cualquier persona se ve afectada.
Estos son los beneficios que otorga la aplicación de este concepto en nuestra vida
No se pueden cuestionar las ventajas que otorga la inteligencia emocional al bienestar mental de cualquier persona, dada la capacidad que tienen de gestionar sus sentimientos. Esto no significa que esta persona sea menos afectiva, o más fría ante una determinada situación, sino todo lo contrario.
Poseer y disfrutar cada uno de los beneficios de este proceso permite la comprensión de nuestras emociones, así como la demostración adecuada de los mismos. Si sabemos leer nuestros sentimientos, nos podremos expresar de la mejor manera sin caer en exageraciones, ni mucho menos hacer entender que no se siente nada. Estos son algunas de las ventajas que trae la adquisición de estos procesos mentales:
- Nuestra concentración se ve mejorada debido a la dispersión de las emociones en nuestros pensamientos. Esto puede influir directamente en nuestro rendimiento en los ámbitos de estudio.
- Nos ayuda a controlar nuestros niveles de estrés y ansiedad viéndonos inmersos en un estado de paz.
- Permite la gestión y el control de los impulsos emocionales que tengamos en determinadas situaciones
- La inteligencia emocional permite mejorar nuestras habilidades sociales al tener un mejor rango de empatía con las demás personas.